Casa de Muñecas.

Edvard Munch: Henrik Ibsen en el Grand Café, 1898
El viernes a pesar de que ya conocía el final, disfruté mucho de la lectura de una obra de teatro que se llama "Casa de Muñecas" de Henrik Ibsen.
Es uno de los libros que más contribuyeron a que hubiera cambios en el mundo, esta obra, publicada y representada en 1871, en su tiempo causó polémicas encendidas y puso en envidencia la injusticia e inequidad del mundo femenino; aunque se escribe en un momento en que se pelea por el voto de las mujeres, y cuando se abren las oportunidades laborales y escolares.
Henrik Ibsen (1828-1906) fue catalogado como pensador y filósofo, aunque sólo pretendió y logró ser poeta y dramaturgo, su obra influyó en el pensamiento y en el vivir de sus contemporáneos, y no sólo en su natal Noruega o en Italia y Alemania, donde vivió.
Ademas de su importancia social, como literato dio vida a un teatro fluido, con dialogos naturales, sin la rigidez de la puesta en escena anterior a él.
Nora, la protagonista de la obra, se convirtió en el símbolo del feminismo, estandarte de las sufragistas, y en ejemplo de las mujeres que se niegan a ser objetos.
Tú, ¿ya la leíste?